-Tt.
Blog satírico dedicado a la Familia Macotela, creado con la finalidad de documentar el paso por el planeta Tierra de esta singular estirpe y recordar sus experiencias, vivencias, vicisitudes, ocurrencias, peripecias, hazañas, desgracias, desmadres, etc...
Tania chema…
Ya de vuelta, ininteligibles lectores, trayéndoles dos nuevas epopeyas Macotelescas. La primera tiene como protagonistas a las hermanas Selene y Tania y, cómo no, a la tía Margara. Cada una es una joyita y el tenerlas a las 3 juntas en una anécdota es, ciertamente, una dicha. En este post veremos lo que resultó cuando estas 2 hermanitas se pelearon por, digamos, no comprender correctamente a su tía Margara (tan bien que se expresa ¿verdad?).
Todo comenzó en el tradicional festejo de la Posada, edición 2013 en la Casa Macotela.
Disfrutando un año más en que la family se reúne en el patio de la casa a divertirse, uno pensaría que mi santa madre se dedicaría exclusivamente, sólo por un año, a gozar la velada sin ninguna preocupación extra pero, no pequemos de ingenuos ¡estamos hablando de la Margara!
Resulta que todos los presentes nos encontrábamos a gusto, chupando y escuchando al ya tradicional DJ Toño, odiado y amado a partes iguales, algunos claro, bailando. Un ambiente festivo sin duda, clásico de la posada, por cierto hay que decir que estuvo muy tranquilita ese año. Una de las más prendidas de la noche era Tania. Baste decir que llevó a un grupo de amigas suyas y, ya envalentonadas con el alcohol, bailaban suciamente a cuanto wey se les pasaba por enfrente.
Pues bien, no se sabe si fue esa actitud tan fiestera por parte de nuestra prima, mamá del buen mozo Dylan y que a su favor diré que era la única que intentaba ponerle emoción a la party o fue otra cosa pero lo cierto es que Margara comenzó a vigilar sus movimientos muy de cerca. Tanto que en un momento de la noche se acercó a Selene y en su más característico tono de confidencia (chisme) le comentó algo así:
—Oye mana ¿que onda con la Tania?
—¿Por qué mana, que hizo?
—No mana, es que ¿qué crees? ya se acabó dos botellas del ese activo y vela ¡ya anda bien loca!
—¡Ay! ¿cómo crees Margarita que va a llevar dos botellas de activo?
—¡Si, si yo la vi y la regañe, hasta le tiré una y se encabronó!
—¡Ay no manches mana!
—En serio mana, dile que no ande haciendo sus jaladas ¿no?
—Bueno… si… yo ahorita veo
La historia nos dice que, después de esta charla, Selene se acercó a su hermana y discretamente intentó aclarar la inquietud de la Margara: —oye Tania ¿cómo está eso de que ya llevas dos botellas de activo?—. Pregunta que al parecer no le cayó nada bien a nuestra prima Tania pues su respuesta fue, en este mismo orden, una mirada furibunda, un tronido de boca y un: —¡Ay no me estés chingando! ¿qué te importa tarada?—seguido de un empujón y manotazos a los cuales Selene respondió, tanto que ¡estuvieron a punto de agarrarse a madrazos!
Con esto, Selene al parecer comprendió que, si su hermana estaba chemeando, no quería ser molestada en ese momento, por lo que la dejó en paz. Al rato, aún carcomida por la duda, le contó todo el enredo a su hija la siempre ecuánime Damaris y le preguntó si ella había notado ese desagradable comportamiento en su tía Tania a lo que Damaris respondió que no: —¡Ay no Mamá! yo estaba al lado de ella y me hubiera dado cuenta, me hubiera llegado el olor.
En este punto hago una acotación para hacer notar una clara vertiente: para salir de dudas, Selene buscó, como hubiéramos hecho cualquiera de nosotros en su lugar, a una experta en el tema de los solventes inhalables y no encontró a alguien mejor que a su hija por lo que yo concluyo que o la Damaris también es chema o seguro alguno de sus novios es o fue y por eso está tan familiarizada con el tema, así como acostumbrada al olor.
Como sea, después de esta declaración de su unigénita, Selene dio, ahora sí, por zanjado el asunto, al menos por esa noche.
Ella misma relata que al otro día que vio a su hermana y ya más calmadas las dos, le volvió a cuestionar sobre si en verdad había estado activándose en plena fiesta como Margara aseguraba. Tania, ya sin empujones de por medio, le contestó que esa información era incorrecta, que nunca en su vida había hecho algo tan deleznable y que en cuanto volviera a encontrarse con su tía Margarita le iba a aclarar ese desafortunado malentendido… bueno, eso hubiera dicho la prima Tania si se tratara de otra persona, pero sabemos que ella no habla así, por lo que, en realidad, lo que le dijo a su hermana se parece más a esto: —¡ay no mames Selene! jajaja ¿cómo crees? ¡pinche Margara me las va a pagar cuando la vea! ¡a ver que lo sostenga en mi cara!
El desenlace de esta bonita historia se dio casualmente al siguiente día pues las 3 susodichas coincidieron, al parecer, afuera de la casa del tío Mario y comenzó cuando Margara al ver a Tania le soltó así sin más: —¿que pasó drogadicta, tu que haces aquí?—. Selene inmediatamente prosiguió: —ahora sí Margara, aquí está, dile lo que me dijiste en la fiesta—. Y Tania, enfrentando a su tía al fin le reclamó: —a ver Margara ¿qué andas diciendo que yo traía activo y no se qué?—. A lo que Margara, mirándola fijamente, es decir, en su cara, le sostuvo:
—¡Sí, no te hagas mensa yo te vi!
—¡Ay no manches Margara, estás loca! ¿a qué hora, a ver?
—¡Ay Tania! ¿no pasé yo y te vi toda loca y te dije: “no andes tomando esas jaladas de activo que te hacen daño” y te tiré una y hasta te encabronaste?
—¡Ahhh! ¡Ay Margara eso no se llama activo se llama Red Bull y es lo que estaba tomando, no se por qué me lo tiraste!
—¡Pues eso tiene muchas sustancias que te drogan y te pones toda activa y te da taquicardia y te hace daño!
Daría lo que fuera por haber visto la reacción de Selene en ese momento en que se dio cuenta que, engañada una vez más, se armó un desmadre gracias a rumores y malos entendidos. Aunque me imagino que fue como cuando el buen de Condorito (personaje de historietas) se caía de espaldas cuando algo le sorprendía (¡plop!).
Una vez más, en descargo de Margara quiero decir que, al menos para mí, en esta ocasión su propósito sí era noble pues quería evitar que la prima Tania se extralimitara tomando bebidas energetizantes, tan dañinas en exceso. El gran problema es que nunca se hace entender debidamente y ocasiona cada anécdota que, por fortuna para todos, en esta ocasión fue más divertida que trágica.
Por cierto, no poseo fotos de ese día, así que si alguno de los lectores (as) tomó algunas, pásenlas ¿no?
Preguntas que quedan después de esta crónica:
¿Porqué Selene dudó si su hermana era chema o no?
¿Quién hubiera ganado la madriza entre hermanas?
¿Porqué, aún después de todo esto, Margara sigue diciendo que el Red Bull y todas las bebidas de ese tipo tienen activo?
Tal vez puedan ser contestadas en otra ocasión. Por último diré que, aparte de esta historia, lo más emocionante que pasó en esta edición de la posada fue lo siguiente:
. . .
Zona Rika in da house
Otro evento memorable de esas fechas fue el festejo de año nuevo 2013 en la Casa Macotela, sí, el mismo festejo que, gracias al Padre, fue amenizado ni más ni menos que por Zona Rika.
Disfrutando por una parte el que al fin el Padre cumple uno de tantos proyectos chalados que se propone en las pedas, y por otro el que toque un grupo de tan buena calidad en el modesto patio de nuestra casa, la familia se dedicó a disfrutar la velada sin preocupaciones. Todos los presentes nos encontrábamos a gusto, chupando y escuchando al grupo, algunos claro, bailando.
Los Macotelas que se llevaron la noche fueron, sin duda, los siguientes:
Tania: que fue invitada por los de Zona Rika y bailó suciamente mientras ellos le cantaban, también suciamente.
Dylan: que bailó toda la noche, se puso la peda de su vida y no sabemos cómo siguió vivo al día siguiente.
Mara: que si a Tania le bailaron sucio los del grupo, a ella no sé ya cómo puedo explicar lo que le hicieron, volvió a sus orígenes, rifándose como las grandes y a todos los bailó.
Selene y el Padre: ella porque el festejo era suyo y el Padre porque al fin cumplió lo que prometió.
El Ulises: se preguntarán porqué lo incluyo pero el aparecerse después de tanto tiempo sin verlo y llegar a empedarse y estar a punto de madrearse al Sammy de Dylan ¡no cualquiera!
Otro de los momentos cagadísimos fue cuando empezó a tocar Zona Rika y al voltear a la puerta que da a la calle, invitados por quién-sabe-quién ¡había una familia entera de los vecinos de enfrente disfrutando el show!
En fin, este evento sin duda ya pasó a la historia Macotela como uno de los más legendarios.
Si quieren ver la breve galería de fotos de ese día Den Click Aquí
Gracias por leer.
Hasta la próxima.
-Tt.