martes, 27 de julio de 2021

María de los Ángeles Macotela Camacho

Y de pronto, nuestra familia cambió.

Bienvenidos nuevamente al blog de la familia Macotela, apreciados lectores. Disculparán la poca constancia en el mismo. Ya fue hace más de un año cuando escribí lo último y la verdad no era para menos pues aunque he recopilado varias anécdotas familiares muy buenas, no hallaba el humor ni la fuerza para escribirlas desde que falleció nuestra, muy querida, tía María.

María de los Ángeles Macotela Camacho, nació el 23 de marzo de 1949 y falleció el 29 de julio del 2020.

Es difícil escribir este post porque me parece que aún no me hago a la idea de que mi tía ya no está entre nosotros. El aislamiento social (obligatorio durante esta eterna pandemia) contribuye a esa sensación sin duda, sin embargo, es necesario brindarle en este espacio un pequeño pero sincero homenaje ya que el show no puede continuar sin hacerlo.

El dolor en la familia es general y comprensible, eso pasa cuando, tan repentinamente, un miembro tan importante y querido nos deja. Nuestro amigo Betanzos me lo ilustró muy claramente "es una pérdida irreparable porque era un pilar en su estructura familiar tan unida que tienen". Tiene toda la razón.

No es la primera vez que sufrimos una pérdida (¿qué familia en el mundo podría presumir eso?) pero llevábamos muchos años sin una tan grande, tan cercana y tan fuerte pues la última vez que nos pasó algo así, algunos éramos bastante jóvenes; nos recuperábamos más rápido de la tristeza. Supongo que es el precio de ser adulto y cada vez mayor. También es especialmente relevante este luto, pues ella fue la primera de los once tíos que se va.

Nos rompió el corazón y lloramos hasta quedarnos sin lágrimas. Tal cual. Pero como me dijo el buen Dylan, en el sepelio: hay que ser fuertes y recordarla con una sonrisa, ella lo hubiera querido así.

En una inmensidad de mundo, es difícil ser memorable y aunque todos lo seremos en mayor o menor medida, algunos lo serán por las buenas razones y otros, claro, lo seremos por otras no necesariamente tan buenas. Pero la forma de Mariquita fue volverse memorable por ser una excelente persona.

Me parece que ella representaba muy bien lo que son los valores de esta familia y aunque siempre la molestábamos con cosas absurdas como su genial apodo de juventud: "Pólvora" o que normalmente terminaba sacando el barrio (y vaya que tenía un carácter muy fuerte cuando se enojaba) la verdad es que siempre fue muy respetuosa y congruente pero sin dejar de lado las bromas. Muchos chistes, ella nos los enseñó, mucho casque, ella lo provocó. Me queda la sensación de que disfrutó la vida plenamente. Amó y fue muy amada. Cuidó a hijos, nietos y hasta bisnietos con el mismo fervor. Viajó mucho. Repartió mucho cariño y momentos felices, imborrables, incontables.

Una gran señora que siempre estuvo presente. Su costumbre, casi llevada a culto, de no faltar a ninguna reunión familiar la convierten en eso, en eterna. Casi no se puede recordar evento o fiesta en el que no estuviera ella. Si mentalmente nos remontáramos a alguna posada o reunión Macotela, en algún momento, al voltear a un lado, invariablemente la veremos, sentada al lado de nosotros y nunca apartada o en una esquina, no, para nada, siempre en primera fila. La primera en llegar y apartar lugar de honor. Ahora no se sabe cómo pueden ser las reuniones sin ella, la pandemia no nos ha permitido descubrirlo. Pero sin duda nos hará mucha falta.

Sin embargo, debemos saber que "muerto" no significa "que se ha ido"; mi tía  María no se fue. Se queda en todos los momentos en que la pensemos. Recordaremos que mi tía fue la que se le escapaba a la abuela Jechu para ponerse pantalones y subirse a las motos de sus amigos; la que jugó canicas, trompo, balero, tacón, futbol, etc, junto a sus hermanos; la que se iba colgando de los camiones con tal de llegar a algún lado; la que fue peleonera en su juventud; la que cuando sus hijos eran críos, jugaba junto con ellos en el patio de su edificio; la que en su foto de boda parece estrella de Hollywood; la que le enseñó a andar en patines a Dylan; la que le enseñó a bailar a Edgar; la que silenciaba a Selene con un "cállate babosa" cada domingo mientras comíamos; la que jugaba volibol echándole todas las ganas; la inseparable compañera de viajes de Natalia; la que le gustaba cantar temas tanto de la época del rock junto a Kchín, de Enrique Guzmán con Cata o incluso la de "chilanga banda" con el Pechugas; la que le compraba calcetines de regalo cada año a Ale; la que se sentaba en las fiestas junto a Margara para viborear los atuendos de las demás; la que se aventaba a las piñatas junto con sus nietos para juntar más dulces; la que sentada en la cocina de Gaby platicaba horas y horas con ella y Nata mientras tomaban rompope de piñón; la que sobaba los pies de la tía Pipol con los suyos propios para ayudarla a dormir; la que se paraba a bailar el "bule bule"; la que siempre le pedía "Stormy" a Los Desfasados; la que no dejaba que le pegaran a Ashby y si la regañaban la consolaba; la que no se olvidaba del regalo en los cumpleaños de Lissy; la que junto con Margara preparaban las mejores quesadillas del rumbo; la que llegaba los domingos a la casa Macotela con su carrito de gelatinas; la que cuando le quitaron piojos a Selma decía que le espulgaran las cejas también; la que me sujetó tan fuerte que no pude zafarme para  ir a corretear a un ladrón mototaxista; la que no se cansaba los domingos de gritar "Ashby!" y luego lo cambió por "Taiyari!"; la que en los conflictos familiares siempre fue la más coherente y objetiva de todos; la que en su cumple 70 bailó con todos sus hermanos y al mariachi le pidió insistentemente "la Bikina". Todo eso y cientos de cosas más fue "Mariquita". Inolvidable.

Descansa en paz, tía querida.

Su partida nos pega como bofetada y nos regresa a la realidad y al más grande de los clichés: qué frágiles somos y qué tan rápido se va la vida. Y ante esto, es inevitable ponernos a pensar que la familia que tanto queremos y conformada por tantos miembros, se puede convertir en nuestra mayor debilidad cuando nos empiecen a dejar. ¿Es la ley de la vida?; sí. ¿Hay algo que podamos hacer para evitarlo?; tal vez: intentar ser valientes ante la muerte. Vivir la vida intensamente y especialmente como familia, cada vez que nos juntemos, tratar de hacerlo memorable. De igual forma, dejarle en claro a las personas cuánto las queremos; dar ese beso que nos faltó, dar ese abrazo que nunca dimos. No arrepintiéndonos de nada o por el "qué dirán". Eso sí, responsablemente y respetando a los demás, no buscando problemas, ya que es la única forma de poder dormir tranquilo por las noches.

Tal vez así, en el momento en que nos topemos con ella, podamos ver a la muerte de frente, tranquilos por haber vivido plenamente. Tengamos presente que algún día vamos a morir, pero los demás días no. Y mientras tanto ¿Qué le decimos al dios de la muerte?.- HOY NO.

-Tt.










viernes, 5 de junio de 2020

Vic y el Coronavirus

A conocimiento de todos, pandémicos lectores, en el momento en que escribo esto, la humanidad está amenazada por la epidemia del Coronavirus desde hace ya alrededor de 6 meses. Teníamos que escribir algo al respecto ya que es un tema serio y crucial a nivel global y al que hay que tomarle la seriedad necesaria, pues es cuestión de vida o muerte.


Sin embargo, sabemos que nuestro querido primo Vic se rige bajo estándares distintos a nosotros, simples mortales, pues (y aquí les pedimos que esto se tome con todas las reservas del caso), según nuestras investigaciones más encausadas, Vicente podría ser el primer Macotela que se recupera exitosamente del Covid-19.


Antes de echar al vuelo las campanas, presuponiendo un posible gen inmunizador Macotelesco, vayamos a los hechos:
Esto que les cuento, acaeció aproximadamente hace unos 3 meses, a principios de marzo, es decir, cuando apenas se empezaba a extender la pandemia por tierras mexicanas y la mayoría aún dudaba de los alcances que pudiera tener en nuestro país. 
Sucedió que, quizá por los inexplicables azares del destino o quizá simplemente porque ambos viven en la misma casa, nuestros primos Vicente e Iván, después de algunas semanas en que no habían tenido contacto, se toparon en la sala y luego del cordial saludo, Iván le preguntó a Vic sobre la epidemia y esto fue lo que pasó:

Iván: qué hay, amigo ¿cómo ves eso del Coronavirus?
Vic: ¡ah, sí!.. A mí ya... me dio... Por eso tengo mi cubrebocas... en mi cuarto...
Iván: 😱 ¿a ti ya te dio Coronavirus?!!
Vic: Sí
Iván: ¿y ya te recuperaste?!!!
Vic:
Iván: puaaaaaaaj!!!! Jajajajaja

Y así, franco, expedito y sin tapujos, Vicente confirmó su nueva inmunidad contra el virus.
En el momento no investigamos más, pues el muchacho es de pocas palabras y nosotros teníamos mucha risa como para seguir cuestionándolo (por cierto, yo fui testigo presencial).

Días después, a Iván y a mí nos quedaban muchas preguntas sin contestar, tales como:
¿Cómo carajo supo Vic que tenía el virus; y dónde y cuándo lo adquirió si no ha salido ni a la esquina?
¿Por qué no requirió hospitalización, aislamiento menor o vaya, por qué ni siquiera una pinche aspirina se tomó?
¿Será acaso que SÍ contrajo el virus pero su inapagable deseo de ver campeón este torneo al Cruz Azul logró en su organismo una recuperación récord? (recordemos que en estos meses se planteaba la idea de darle en automático el título de Liga al Cruz Azul y terminar el interrumpido torneo).

Pues bien, con todo esto en mente, decidimos confrontar nuevamente al susodicho y resulta que ahora, a unas semanas de haberlo dicho, negó tajantemente todo.
En un claro episodio de amnesia autoinfligida, nuestro primo Vicente negó recordar la conversación anterior e incluso amenazó a Iván y le dijo algo así como "¿por qué estás diciendo que yo soy el Coronavirus?".
Iván trató de razonar con él, como muestran las siguientes imágenes. Le prometimos inmunidad en caso de sentirse amenazado por revelarle al mundo la verdad sobre la pandemia, pero todo fue en vano.

Y esto fue el final de la historia, fieles lectores, ya que no creemos necesario mencionar cuando Vic fue a contarle al Lindo que estábamos acosándolo a preguntas y casi se arma una madriza Iván-Lindo de resultados épicos.
Bueno, eso ya fue invento, pero todo lo demás NO! y sí, Vic nos dejó, como siempre, más preguntas que respuestas, sin embargo, no descansaremos hasta recuperar la verdad que tiene entre labios pero alguien (o ¿algo? o ¿alguna organización?) no quiere que nos la revele.
Hasta luego. 

-Tt

jueves, 21 de mayo de 2020

Tío Gus alburero.

Nuevamente sean bienvenidos, desinfectados lectores, a su querido blog de cabecera y publicación semanal.

Nuestra peculiar familia, sépase de una vez, es el resultado de cuanta tragicomedia nos ha tocado escenificar, muchas veces involuntariamente, en este espectáculo llamado "vida". Este blog es un altar a dichas experiencias, que quedaron convertidas en épicos relatos.

Pues bien, nuestra entrada de hoy viene compuesta por dos de esos relatos y el protagonista es, nuevamente, nuestro querido granuja del tío Gustavo y su afilada picardía.
Adelante.





Gus moribundo.
El primero ocurrió cuando nuestro tío tenía, aproximadamente, entre 18 y 20 primaveras de vida y como cualquier chavo normal de su edad, ya le interesaban las artes alcohólicas y se dedicaba a practicarlas cuando se presentara la ocasión.
La ocasión se le presentó un domingo a la tarde, terminando de jugar al fútbol, cuando decidió echarse unos tragos junto con varios amigos y conocidos para mitigar el calor (bonita tradición familiar que se extiende hasta nuestros días)
Los tragos que iniciaron al lado del campo de fut pronto se convirtieron en una peda, pero no una cualquiera, sino una que se trasladó, ni más ni menos, que a la casa de los Tovar. (Sí, los vecinos que vivieron muchos años frente a nuestra casa). Es decir, una mega peda. En palabras del tío Gustavo "Esos weyes eran unos profesionales del alcohol. Estábamos tomando cerveza, luego pulque y ya en su casa empezaron a sacar de todo; todo lo que se pueda chupar. Creo que hasta Tutsi Pop me dieron."
Como buen Macotela, Gustavo no se rajó, sin embargo, su temprana edad hizo que sucumbiera y perdiera la batalla contra el alcohol, tanto así que los vecinos lo terminaron sacando prácticamente arrastrando, según se cuenta, para llevarlo a su casa a dormir.
¿Cómo logró subir las escaleras hasta llegar a su habitación y luego a la comodidad de su cama? no está del todo claro, pero lo hizo. Tampoco está del todo claro qué tantos líquidos le suministraron sus hermanas, Margara y Natalia para bajarle la borrachera, pero se sabe que incluyeron varios vasos de café y agua con alka-seltzer, hasta que concilió el sueño.
Parecía que la noche iba a ser tranquila hasta que alguien fue nuevamente a llamar a Margarita para que subiera a ver a Gustavo, pues se había puesto mal. Al subir al cuarto de su hermano (recordemos que en esa época la mayoría de los 11 hermanos aún vivía en la casa), Margara vio que ahí estaban su mamá la Jechu y Natalia con caras por demás preocupadas. La abuela incluso lloraba desesperada y le decía que su hermano se iba a morir. Le dijo algo así como "tu hermano está muy malo, está delirando, ya hasta quiere que lo llevemos al Rancho". Y efectivamente, cuando se acercó más a la cama del moribundo, lo encontró gimiendo, quejándose. ¿Se habría puesto tan mal su hermano como para dar instrucciones de que lo trasladaran a Hidalgo a ver el terreno del Rancho, por última ocasión, antes de dejar este vil mundo? ¿Eran los dioses tan crueles?


Margara se inclinó acercando su cara a la de su hermano para que éste le repitiera qué es lo que necesitaba, cuál era su última voluntad... a lo que el tío Gus, mortecino, sin abrir nunca los ojos separó los labios y le dijo:

"Quiero miar... bolíto!"


De inmediato y aún estupefacta, escuchó a la Jechu decirle contrariada "¿ya ves? quiere que lo llevemos a ver a su arbolíto al Rancho". A lo que Margara respondió "No, mamá, lo que quiere es orinar!"

La historia cuenta que después de ayudarlo, como pudieron, a incorporarse, llevarlo al baño de la tía Natalia (por ser el más cercano), ver cómo descargaba su vejiga en el lavamanos, en lugar del inodoro mientras Natalia huía de la escena escandalizada y llevarlo nuevamente a su cama a descansar, el buen tío Gustavo durmió como bebé hasta el día siguiente.
Al final, por esta vez, la preocupación de la abuela quedó sólo en anécdota gracias al buen tino de Margara de juntarse desde temprana edad con gañanes de todo tipo y conocer de albures mejor que su mamá y su hermana mayor.
Fin.





Gus porno.
El segundo relato, es mucho más actual, de hace algunos meses. Con un tío Gustavo ya en la etapa de esposo y padre comprensivo, es decir, la etapa más madura de su vida... o eso se suponía, hasta que ocurrió la siguiente historia.

Casualmente sucedió en el Rancho y es que no sabemos por qué razón se le da tan bien este lugar al tío Gus pero así es y hay que hacernos a la idea.
Estaba tomando el tío unos días de descanso en dicho paraje junto con algunos miembros de su parentela y familia política, incluyendo a una cuñada (quien pidió el anonimato para evitar el escarnio social)Se encontraban echando un vistazo a la naturaleza del lugar, que consiste en árboles frutales, cactáceas, algunas flores llamativas, etc. cuando, de pronto, se posó cerca de ellos un pájaro. Una bonita ave endémica de pecho rojo que quizá se trataba de un mosquero cardenalito, bastante común de ver por la zona.


Al ver a tan peculiar espécimen, la cuñada le comentó "mira qué bonito pajarito, ¿cómo se llama?" (obviamente, buscaba información sobre a qué especie pertenecía dicha ave). Pregunta que al jocoso tío Gustavo se le ocurrió responder diciendo "es el pájaro quema-mais".

No se necesitaba haberse criado en Jesús Carranza o la esquina del Eje 1 y Tepito, para darse cuenta de la tomada de pelo del tío Gus, pero al parecer su cuñada era más inocente que Ale y Tete a los 7 años creyéndole a su mamá que su papá se había ido a salvar vidas a los Estados Unidos, pues ni se enteró. Y ahí quedó la broma.
Al menos eso fue lo que pensaba el tío Gustavo, ya que días después, ya de regreso en la ciudad, durante una reunión social, el esposo de la mencionada cuñada se le acercó para reclamarle algo como "oye mi Gus ¿cómo está eso de que en el Rancho le enseñaste a mi esposa el pájaro quema-mais?".
Divertido, el tío Gustavo estaba a punto de responderle al susodicho, para aclararle la situación y evitar un probable conato de bronca (los Navarro suelen ser impredecibles), cuando la cuñada se le adelantó y a la pregunta del marido le agregó un "sí, ¿verdad que está bien bonito, Gus?".
Ante tal demostración de desconocimiento del albur por parte de la señora, a Gustavo solo le quedó cagarse de la risa junto con los demás hombres que obviamente entendían la broma (Navarros, al fin y al cabo) y al final terminaron explicándole el chiste a la cuñada y destapando otra cerveza.
Brindaron en honor al hecho de que si existía una cuñada casada y con hijos, que no supiera qué era el "pájaro quema-mais", el mundo aún tenía esperanza... o quién sabe, la verdad es que la moraleja de la historia se perdió por la tremenda peda que también en ese día se pusieron.
Fin.



-Tiberio.

sábado, 16 de mayo de 2020

Paulina y los Nazis.


Qué tal, cuarentenos lectores! (por la cuarentena por Covid-19 en la que nos encontramos actualmente, no por la edad, jejeje).
Después de casi 5 largos años, volvemos a las andadas en este H. Blog.
Esperamos que esta vuelta sea, ahora sí, permanente.

Sin más preámbulo, descubramos qué tienen en común nuestra querida Paulina y los Nazis... sí, los Nazis.



                                 Ella es Paulina, la adorable hija de la prima Selma...




Que tiene estos ojos...





Los cuales se parecen mucho a estos ojos...



Ojos de zombie de la serie The Walking Dead...





Serie en cuyo segundo capítulo de la 2a temporada aparece la metanfetamina azul de otra serie muy famosa, Breaking Bad...





Esta serie en donde el protagonista es ni más ni menos que un sujeto que se hace llamar Heisenberg...






Nombre que el mismo sujeto dice que tomó prestado del físico alemán Werner Heisenberg, quien tuvo un papel importante durante la Segunda Guerra Mundial...








Guerra durante la cual predominó la figura del dictador alemán Adolf Hitler...






Quien lideró al partido Nacionalsocialista, mejor conocido como Nazi...




Ahora ya sabemos qué tienen en común Paulina y los Nazis.
Sígannos para más clases de historia desvirtuada.
Gracias, saludos.

viernes, 25 de diciembre de 2015

Fotos Gays....

Sí, ando de ocioso, pero tal vez sea bueno.
Espero postear más este año y que Titus se quite de una vez la weba y también nos regale muchas publicaciones.
Por lo  mientras los dejo con algunas fotos del recuerdo:


Sí, me cuesta aceptarlo pero en algún momento, creo que mi mamá pensó que ambos éramos gay y que era buena idea que Tt y yo le fuéramos al América, no le bastaba con vestirnos de a gemelitos, nos humillaba también con eso.

Sí señores Si!. En algún momento de la historia mi querida comadre Tania no tenía ese descomunal trasero mutante que la caracteriza. Lo gay de la foto es la pose del Ale pidiendo su balero.


Aquí apreciamos como Lissy, que bien podría pasar como un gay playero, debido a su corte de casco, espiaba a los chicos "sabrosos" que transitaban en la playa, pero no se confundan, aunque traiga binoculares los tipos estaban a dos metros.


Aquí podemos apreciar la terapia de choque que Margarita utilizaba en sus hijos, nótese la puñaléz del Tt que no entendía que a pesar de tener salvavidas y flotis no se iba a ahogar.


Ok, no me da miedo decirlo: " Es el soldado más gay que he visto"


Y hablando de cosas gay, aceptémoslo, aunque hubo una época en la que Neco infundía terror incluso a su propia familia, lo cierto es que aquí parece lesbiana gorda y Natalia parece estar imitando a un velociraptor



Seguimos con las notas de arcoiris. No sé si mi mamá le robó la pose al Lindo o fue al revés, lo que sí es seguro es que no duraría más de cinco minutos frente al Rafufis.
Contrastando totalmente, nótese la cara de "balebergalabida" de Martín.



Y esto no termina señores. No sé quién inventó esos shortcitos tan gays o quién les lavó el cerebro para convencer a los hombres de que se veían bien. Más que una moda era una mentada de madre a la masculinidad y aunque Gustavo lo porte orgulloso no le quita que se viera extra gay.


Ok.
Como es posible que yo no pueda cantar una canción relativamente gay de Grupo Marrano en Año Nuevo sin que K-chin se vuelva loco y me desprecie por mi supuesta orientación sexual y él sí puede cumplir su fetiche de ser una nenorra de arena???


Saludos.








Those where the days...... (para los que estudiaron en el conalep: "Aquellos fueron los días..." )

Hola, bienaventurados lectores ávidos de historias graciosas.
Hoy no hay tal.
    En esta ocasión les cuento que hace unas semanas, La Margara (aquella preciosa señora que funge como actual matriarca de la familia por desición propia y autodenominación antidemocrática) sacó sus "álbuns" de fotos y decidí dedicarle un pequeño pero significativo espacio en este, su Blog de confianza.
    Como la mayoría de ustedes sabrá, esta peculiar señora gustaba hace algunos años de un gran pasatiempo: (no, no era irse a besar con el Bozo a la vuelta) era tomar fotografías. Este "hobbie" pronto ganó terreno en su corazón ya que los constantes viajes alrededor de la República Mexicana eran la perfecta oportunidad para explotar al máximo sus entonces recientemente adquiridas habilidades como "fotógrafa experimental".
    Para aquel ojo no entrenado, las fotografías de Julié Margott (nombre artístico que usaba en la década en que quizo ser famosa) no son más que tomas aleatorias, mal enfocadas y mal encuadradas a cuantipendejada se le atravesara en su camino por los pueblitos y playas mexicanas. Uno podría pensar que, mientras tuviera rollo a la mano, la cámara de Margott habia sido arreglada de tal manera que, sin apretar botón alguno y en mano de cualquier persona, tomaba fotos cada cierto tiempo, a pesar de las condiciones de luz, la hora del día o la escena apropiada; tomaba fotos solita pues.
    Nada más alejado de la realidad. Para los expertos, el talento innato de Julié Margott se refleja en cada una de sus fotografías, revelando la esencia oculta de cualquier cosa. Parece que fuera ella la única persona capaz de capturar el alma de las cosas, las personas, la naturaleza...todo. Su talento le permitía detener el tiempo y plasmarlo para que las generaciones futuras disfrutáramos de alguna historia contada simplemente con una imagen.
    Es difícil catalogar a Margott en alguna corriente artística debido a que su obra es amplia y muy variada; es cierto también que no se le ha reconocido lo suficiente como artista experimental pero esperamos que algún día el mundo pueda darse cuenta de lo mágnánimo de su trabajo y la reconozca como lo que es: una pionera de la fotografía conceptual y experimental, de gran sensibilidad y sobre todo, de gran talento.
    Desde este Blog, le mandamos un saludo esperando que le haya gustado esta pequeña nota y a usted, querido lector, lo dejamos con una de sus piezas más representativas, titulada:

                                                                     "Guá da fóc?"
disfrútenla:

domingo, 20 de octubre de 2013

¿Y ahora...Quién podrá ayudarnos??!!



Qué tal hambreados lectores?

   Hoy me toca a mí narrar la triste y surrealista anécdota sucedida este 19 de Octubre.
   Era un sábado cualquiera en la casa de "La Jechu",  las mellizas La Tostada y La Guayaba (Damaris y Flor), pusieron su puesto de garnachas como ya es costumbre. El puesto, conocido popularmente como "Las Fritangas", abría nuevamente su carpa para ofrecer a los transeúntes las ya conocidas bombas de calorías y colesterol malo: alitas, banderillas, papas fritas, etc...
   Como es bien sabido, el 70% de la familia gusta de ingerir bebidas espirituosas a la menor provocación, entiéndase un -"Chale, está el puesto de fritangas....vamos a chupar.."- como tal.
   Y así fue que, Tete, Selene, María, Flor, Damaris y Selma, envalentonados por el Torres y el Chivas Regal que acababan de "nahualearse" de la reserva de la casa, decidieron echar trago en la calle a la luz del foco garnachero, ignorando las miradas despectivas de los vecinos.
   Todo transcurría normal: Selma se había ido voluntariamente a webo hacía una hora del lugar y había dejado a los demás en su tertulia, era, por mucho, "una peda tranquila", cuando, de pronto, por detrás de Tt y Selene,  una voz aguardientosa acompañada de un cuchillo cebollero de 30 centímetros  dijo: -¡A ver, saquen sus celulares y todo lo que traigan!-


    Tt, pensando por la voz aguardientosa que se trataba de "El Padre", esposo de Selene, no le tomó importancia, así que impávido, sorbió con elegancia su vaso con whisky haciendo caso omiso del cuchillo que se balanceaba entre él y Selene; ella en cambio, sí notó que la voz no pertenecía al amor de su vida y fué tomada del brazo por el hombre que en ese momento supieron, era un amante de lo ajeno y que ahora apuntaba su cuchillo con trémula decisión a Selene diciendo: -Ándale, dame tu celular-
   Todos estaban pasmados, el ladrón los había tomado por sorpresa y ahora estaba a las espaldas de Tt y Selene, exigiendo sus pertenencias, amenazante y drogado.
Selene ofendida, le dijo: -¡Noo!! No te voy a dar nada, ¡suéltame! y haciendo uso de su pericia tepiteña logró zafar el brazo de su atacante poniéndose de pie y gritando: -¡Vas a ver, ahorita vas a ver! Le voy a hablar a la policía- y corrió adentro de la casa gritando.
   El ladrón seguía ahí, apuntando a los presentes cuando María, abriendo su monedero-bolso, le dijo: -Tranquilo, tranquilo, mira, no traigo nada, tranquilo-. Él no hizo caso y tomó un cuchillo que las fritangueras tenían en la mesa de su puesto; ahora, doblemente armado, amenazó nuevamente.
   Tt, viendo que no tenía oportunidad ante él le dijo que se calmara y le dio su cartera esperando que eso le bastara para dejarlos tranquilos y  no les hiciera daño. En ese momento salí de la casa acompañado de Selene, había sido advertido por ella de lo ocurrido y fui para ver en qué podía ayudar, el ladrón, teniendo en sus manos la cartera de mi hermano y dándose por bien servido corrió a su vehículo de escape: un bicitaxi con lona rosa. 
   Sí, así como lo leen, bueno, un mototaxi, porque realmente quedan muy pocos bicitaxis ya que casi todos  tienen "reguettoneta", pero así se les sigue diciendo.
Selene, presa de la descarga de adrenalina que corría por su cuerpo dijo lo más inteligente que se le pudo ocurrir dirigiéndose a su hija: -¡Aviéntale el aceite al culero!!
   Damaris, conocida ampliamente por su estado berserker cuando suceden este tipo de cosas, no lo pensó dos segundos, todavía no terminaba su mamá de decirle cuando ella ya tenía alzado el freidor con litros de aceite caliente y dispuesta a vaciar su contenido en la humanidad de aquel hombre que acababa de ultrajarlos.

   No lo logró. Su escuálido cuerpo, producto de porquerías no nutritivas a lo largo de los años le han dado fuerza para aventar botellas y vasos con "cubas", pero no para arrojar algo pesado, mucho menos si el recipiente está caliente. El aceite se derramó sobre la acera seguido de la rabieta de Damaris, seguro, lamentándose el no haber comido sus verduras cuando niña. 
   Tt, reaccionando con rencor hacia el agresor, se levantó de su silla dispuesto a abalanzarse sobre él pero María lo agarró firmemente, impidiéndole avanzar mientras Flor le gritaba: ¡Déjalo¡ ¡No vayas!.
El ladrón había alcanzado su bicitaxi y arrancó, dejándonos allí, viéndolo alejarse.
   Corrí adentro de la casa y tomé las llaves del carro, tenía una oportunidad de alcanzarlo y no la iba a desperdiciar; en el camino me encontré con Lore que me preguntó:- ¿Qué está pasando?-. 
 -Las están asaltando-. Le dije.
   Salí lo más rápido que mi cuerpo desmielinizado me permitió pero no advertí el suelo mojado; resbalé y caí hacia atrás golpeándome en las nalgas y la cabeza, nada grave, me incorporé y junto a mi hermano subí al carro para perseguir a este tipo mientras Damaris se quedaba en la esquina gritando improperios hacia el hombre que la había ridiculizado.
    Después de vueltas y vueltas y de una parada en el bar local, nos dimos por vencidos. No lo hallamos.
De regreso a la casa, la patrulla ya estaba ahí, tomando las declaraciones de Selene y las demás.
   Nos pusieron en aviso que ese color rosa del bicitaxi, pertenece a las bases de la Romero Rubio, así que bueno, ya sabemos algo.
   Cuando los policías preguntaban -¿Qué se llevó?- Damaris, con alevosía y ventaja y para detrimento del ladrón les dijo: -Un iphone 4s, las ganancias del día que eran como 500 pesos y la cartera de mi primo-
Lo cierto es que, el ladrón sólo se llevó la cartera de Tt, en la cual, afortunadamente no había dinero, sólo su IFE y algunas fotos, ah, y su boleto del melate.
   Y ahora se estarán preguntando:¿Qué chingados tiene que ver con esta historia la imagen de Lore como el Chapulín Colorado?
   Ah, pues tiene todo que ver. Imagínense: los están asaltando, te escapas, entras a pedir ayuda y piensas en alguien, alguien fuerte o capaz o hábil. Cuando Selene logró zafarse del ladrón y entró a pedir ayuda la única persona en la que pudo pensar para que hiciera algo fue Lore. (aunque ella dice que no lo recuerda)
   Sí, Selene entró gritando: -¡Loreeee!¡ Looooooreee!! ¡Auxilio, ven, nos estan saltando!!. Entró a la sala y me encontró a mí y me dijo: -Nos están asaltando, háblale a la policía-. Algo casi imposible ya que ella agarró el teléfono cuando dijo eso. Al saber que estaba ocurriendo el asalto salí.....y lo demás ya lo leyeron.
   Así pues, termina este pequeño relato, donde las emociones se desbordaron y los corazones se abrazaron, ya que nadie salió herido.
   Cabe destacar, que seguimos ofendidos, no por el asalto en sí, no porque sí se llevó la cartera de Tt, no porque por su culpa nos caimos, no porque Damaris tiró el aceite, no porque gastamos gasolina del carro en buscarlo, no porque sea increíble que ya sean tan descarados los ladrones....No....por lo que realmente seguimos ofendidos es porque el hijo de la chingada, ¡se llevó el único cuchillo que servía!!

Ale.